Thomas es un joven que vive en Portpatrick, un apacible pueblo costero escocés. Lleva una vida serena ayudando a su madre en la granja familiar. Pero su tranquilidad se ve alterada cuando recibe una misteriosa carta que resulta ser de su padre, el que ha muerto hace quince años. En ella le revela la existencia de un sobre en el cual ha dejado un mensaje para él. Thomas debe buscarlo en alguna parte de África. El mundo está convulsionado por la Primera Guerra Mundial, pero eso no le impide embarcarse en una aventura, junto a su perro Alfred, en el corazón de un África salvaje de principios del siglo XX, donde se vive sin ley y la vida no vale absolutamente nada, mucho menos si se trata de la de un negro. Un viaje donde lo que ve y lo que vive, lo marca para el resto de su vida.